GTD: la lista «algún día / quizá»

Hemos hablado sobretodo de cómo organizar el trabajo que ya estamos haciendo, pero hemos hablado poco de hacia dónde nos dirigimos.

Imagínate que un día…

La lista «algún día / quizá» sirve para apuntar todos esos proyectos e ideas locas que no puedes hacer ahora. ¿Quieres hacer tus propias canciones pero necesitas aprender a tocar un instrumento primero? Apúntalo en la lista. ¿Quieres reformar tu baño porque ha quedado un poco anticuado? Ponlo en tu lista «algún día / quizá».

Actúa a la vez como registro y como dinamizadora de acciones. La lista «algún día / quizá» actúa como registro, porque puedes apuntar ahí todas las ideas que se te ocurren y se salen un poco de tu actividad diaria. No te pasas el día reformando baños. Tampoco lo vas a reformar ahora mismo. Ni siquiera lo estás planeando. Sólo quieres que no se te olvide por si llega un mejor momento. También apuntar todas tus ideas puede ser muy útil para tu creatividad. De todas las que se te ocurran, quizá un 90% puedan deshecharse, pero basta con encontrar una gran idea para que valga la pena. Esta gran idea no debemos dejarla escapar, la apuntaremos en la lista.

Como dinamizadora de acciones, la lista «algún día / quizá» es una guía de lo que deseamos cuando podemos dedicar un rato a tener una visión más amplia de nuestros objetivos. Esto es, revisar si lo que estamos haciendo nos acerca a lo que queremos llegar a hacer, u optimizar unos nuevos recursos para conseguir nuestros sueños. Pongamos que un día nos toca la lotería, tenemos la devolución de los impuestos, etc. ¿Qué podemos hacer con los ingresos? Una opción es que no tomemos ninguna decisión y al final ese dinero se diluya; otra opción es que con el «calentón» nos lo gastemos en cualquier cosa que se nos ocurra… Para que, justo después de haberlo gastado, nos arrepintamos por no poder arreglar el baño.

En cambio, si al conseguir ese dinero echamos un vistazo a la lista de «algún día / quizá», veremos que un día que nos estábamos cepillando los dientes antes de irnos a dormir nos dimos cuenta de que el baño necesitaba unos cambios, y que hasta ahora no había sido posible hacerlo.

No hace falta que recibamos una inyección de dinero, sino de cualquier otro recurso. En una celebración nos pueden regalar un cheque para cambiar por un viaje, y aprovecharemos la oportunidad para hacer el viaje de nuestros sueños. O puede ser tener más tiempo libre, como unas vacaciones (¿quién no ha tenido una lista de «cosas que haré las próximas vacaciones?») o haber acabado otros proyectos. Para esto, es importante revisar semanalmente la lista «alguna vez / quizá», por si tenemos más tiempo ahora o ha cambiado cualquier circunstancia que nos permita activar  un proyecto.

La lista «algún día / quizá» es sencilla, simplemente es necesario apuntar el objetivo que se desea conseguir. No es imprescindible desarrollar más lo que apuntemos, pero podemos hacerlo si queremos. Si, por ejemplo, se nos ocurre alguna idea sobre el proyecto, la apuntaremos para que no se pierda: ¿por qué no poner baldosas iguales en el suelo y la pared del baño, puestos a cambiar?

No te olvides de la lista

Si realmente revisamos nuestras lista «alguna vez / quizá» nos daremos cuenta con más frecuencia de la que creemos que los proyectos con los que soñábamos no son tan utópicos, que podemos dividirlos en acciones más simples y que esas acciones las podemos hacer desde ahora. Y si todo lo que se te está ocurriendo sobre esa idea para hacer algún día son acciones que podrías hacer ya mismo, ¿seguro que no es momento de activar ese proyecto y empezar a trabajar con él?

Fotografía: Bodhisattva por h.koppdelaney