¿Es GTD la solución a todos mis males con el trabajo pendiente? Veamos: sí, con GTD tendremos varias listas de tareas; sí, con GTD me quitaré de la cabeza la obligación de pensar contínuamente en el trabajo. Sí, ahora tengo mi bandeja de entrada vacía y sé qué toca hacer al respecto. Pero no, al final del día no estoy satisfecho con el trabajo realizado.
¿Qué está fallando? Pues pueden ser varias cosas. Lo que seguro que no está fallando es el sistema GTD. ¿Cómo lo sé? No es porque a mí me funcione (que lo hace) y por eso tenga que funcionarle a todo el mundo. Pero un sistema GTD (es decir, las listas de tareas y las carpetas) no puede evitar que trabajemos (igual que no puede trabajar por nosotros… ¡Eso sí estaría bien!).
Aquí hay algunas cosas a tener en cuenta:
- ¿Estoy aplicando GTD correctamente? Al principio no es evidente empezar con GTD. No conozco a nadie que haya conseguido sentirse a gusto con él y entenderlo con una sola lectura. Sigue otra vez todos los pasos, en un segundo vistazo seguramente lo veas con más claridad
- ¡GTD no es para mí! ¿Has aplicado todo lo que pone en el libro al pie de la letra y sientes que es más un estorbo que una ayuda para ti? Quizá has sido demasiado estricto. GTD ha de ser tu RAM, la memoria secundaria de tu cerebro, y se ha de entender con él. Si lo necesitas, haz algunos ajustes. Como dice Miguel de Luis, GTD son unas directrices para crear tu sistema. Aprende la bases y adáptalas a ti.
- GTD me resulta útil, pero aún así no soy capaz de sacar trabajo. Revisa tus próximas acciones, proyectos y sobretodo tus objetivos. ¿Qué tienes apuntado? ¿Es realmente lo que quieres hacer? Si no te motivan los objetivos que te has marcado, tienes un problema de base que ni GTD ni otro sistema te va a solucionar. Si en cambio sí deseas llegar a esos objetivos pero hay acciones en el proceso que te tienen atascado, puedes probar a delegarlas a otras personas, y si no tienes más remedio que hacerlas tú prueba a que sean tus primeras tareas del día.
Fotografía: Jerry vents out por henribergius